Laia Forés

Si tuviera que definir lo que ha significado Travel Work en mi vida, diría que no sólo fue una experiencia más, sino que supuso un gran cambio, uno de los mejores de mi vida.

Hacía ya años que me planteaba la idea de irme al extranjero, pero no había ningún intermediario que me transmitiera la confianza que me transmitieron Eva y su equipo, así que decidí irme de prácticas en el sur de Inglaterra durante dos meses a mejorar mi experiencia laboral y mi inglés en el ámbito en el que me quiero dedicar en un futuro, el de la discapacidad.

Fui elegida en el mejor lugar de prácticas que podría haberme tocado, en una organización de niños con todo tipo de discapacidades físicas y mentales, que me permitieron mejorar muchísimo mi inglés, ya que su habla es mucho más compleja de entender y, por otro lado, también tenía que realizar tareas de administración que me permitieron avanzar con la escritura y el vocabulario.

En cuanto a la familia, diría que en esa zona la gente en general, es muy amable y muy cercana, y la familia también lo fue. Al principio, tenía un poco de miedo por la comida, pero me tocó una mujer con mucho arte para la cocina y comí mucho durante mi estancia.

También, hice muchos amigos y formamos un grupo muy bonito que siempre iba de un lugar a otro visitando toda la Rivera Inglesa que en mi opinión, muy bonita con unos grandes paisajes.

Y sin duda, este viaje marcó un antes y un después en mi vida, ya que después de haber estado años enferma de un tumor en la columna, me dio la confianza para demostrarme que siempre hay piernas para descubrir, para viajar, y que siempre habrá personas que te ayudarán a hacerlo más fácil.

Este año, he decidido irme dos meses a Viena, a hacer unas prácticas en un ámbito más de atención al público, para mejorar aún más mi inglés, y hacer un curso de alemán, para empezar a aprender otro idioma, acompañada del chico que hace un año consiguió enamorarme en la bella Rivera Inglesa.